David Amess ha sido apuñalado en una iglesia en el condado de Essex
El diputado del partido conservador británico David Amess, de 69 años. Fue asesinado apuñaladas este viernes durante un acto político con ciudadanos en una iglesia de la localidad de Leigh-on-Sea, en Essex, un condado al sureste de Inglaterra.
Según testimonios, el diputado del partido de Boris Johnson ha recibido varias puñaladas cuando se encontraba en la iglesia en un encuentro con vecinos. Los servicios de emergencias han intentado reanimarle, pero no ha sido posible.
La Policía ha comunicado la detención de un hombre de 25 años y ha confirmado que una persona había sido apuñalada, pero sin revelar su identidad. También ha señalado que no buscan a ningún sospechoso más y que facilitarán más información cuando la tengan.
Las reacciones políticas no se han hecho esperar en un país que aún recuerda el asesinato en 2016 de la eurodiputada laborista Jo Cox durante la campaña del Brexit en plena calle por parte de un neonazi.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha manifestado su tristeza por el asesinato del diputado, a quien ha calificado como «una de las personas más amables, bondadosas y gentiles de la política», y de quien ha destacado que «creía apasionadamente en este país y su futuro».
«Hemos perdido a un buen servidor público y a un amigo muy querido», subrayó el primer ministro conservador sobre su correligionario.
«Noticias muy alarmantes y preocupantes provenientes de Leigh-on-Sea. Mis pensamientos y oraciones están con Sir David Amess y su familia», ha dicho el ex primer ministro conservador David Cameron.
Asimismo se ha expresado el líder de la oposición laborista, Keir Starmer. «Noticias horribles y profundamente impactantes», ha dicho en un tuit donde ha aprovechado para mostrar su afecto a familiares y allegados.
Además, Brendan Cox, el marido de la eurodiputada asesinada, como la fundación Jo Cox, se han mostrado consternados por lo ocurrido. «Atacar a nuestros representantes electros es un ataque a la propia democracia. No hay excusa, no hay justificación», ha señalado Cox.