Estudio ruso revela que la composición química de la dieta cambia, cuando se excluyen los productos cárnicos
La exclusión de los alimentos de origen animal no es del todo beneficiosa, la posibilidad de enfermarse está presente, debido a que la composición química de la dieta cambia, reveló un estudio de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos (Rudn por sus siglas en ruso) publicado en la revista internacional Microelementi v Medicine (Microelementos en la Medicina).
El padecer anemia megaloblástica por deficiencia de vitamina B12 y no de hierro, es uno de los principales problemas para la salud de los vegetarianos y veganos porque los alimentos vegetales carecen casi por completo de este complemento, teniendo en cuenta que las plantas no la acumulan.
Los vegetarianos, consumen cierta cantidad de vitamina B12 en huevos y lácteos, mientras que los veganos no.
«Los amantes de la comida mixta padecen con frecuencia la anemia megaloblástica. Esto se debe al hecho de que a diferencia de los veganos y vegetarianos, consumen una cantidad insuficiente del ácido fólico y su deficiencia conlleva una división celular anormal», informó para Sputnik, Alexéi Gálchenko, auxiliar del Departamento de Elementología Médica del Instituto Médico de la RUDN.
La disminución de la densidad ósea por falta de calcio, se suma a la lista de desventajas de la dieta sin productos cárnicos, afectando más a los veganos que a los vegetarianos.
En este caso, los investigadores explicaron que no puede ocurrir una buena absorción de calcio con la ausencia de vitamina D, presente mayormente en pescados y en menor cantidad en otros productos de origen animal, como hígado y huevos. Los productos vegetales, tienen poca vitamina D.
La RUDN, indicó que la dieta vegetariana y especialmente la vegana, disminuye el consumo de ácidos grasos saturados y colesterol, indispensables para regular las propiedades físicas de las membranas celulares y participar en la síntesis de muchas hormonas.
En las personas con una alimentación balanceada, el hígado cumple bien su función de sintetizar el colesterol, incluso cuando está ausente en la dieta.
Cuando hay exceso de colesterol, este no puede encontrar un lugar en los tejidos y circula en los vasos sanguíneos por un largo tiempo, aumentando el riesgo de padecer aterosclerosis y enfermedades cardiovasculares.
La alimentación de los veganos por ser menos rica en calorías, reduce el riesgo de obesidad y diabetes tipo 2 en cuya prevención varios microelementos desempeñan un papel relevante.
Los vegetales son ricos en manganeso, cobre y cromo, excelentes para regular los niveles de glucosa en la sangre, mientras que para controlar la insulina se necesita zinc, cuya absorción en los vegetales es casi nula.
En base a esto, los investigadores recomiendan establecer una dieta saludable y equilibrada.
Los vegetarianos, veganos y quienes consumen productos cárnicos, deben acudir a un dietista profesional para otorgarle al organismo todos los nutrientes que necesita para mantenerse fortalecido.
