Khet de 2 años de edad, fue enterrado en la parte trasera de su casa al sur de Vietnam, donde su fiel amigo le lleva hasta frutas
Mino, es el nombre de una perra que lleva 3 de sus 4 años de existencia, viviendo sobre la tumba de su dueño Khet, un niño de 2 años de edad, quien murió ahogado en una acequia cercana a su casa, ubicada en la provincia de Long An en el delta del río Mekong al sur de Vietnam.
La perrita y Khet -según reseñó EFE- nunca se separaban. El año que estuvieron juntos, funcionó para estrechar fuertemente el amor entre ambos.
La abuela del niño, Nguyen Thi Ut, relató que 3 días después del entierro de su nieto -realizado en la parte trasera de la casa- Mino se acostó sobre la tumba y hasta ahora permanece en ella. Ni el fuerte Sol, ni la lluvia hacen que la perrita se levante para buscar refugio.
“Traté de que dejara de ir porque no me parecía bien, pero siempre terminaba volviendo. Al final decidí dejarle”, manifestó para el medio, haciendo referencia a que Mino llegó a la familia, cuando era un cachorro y Khet, tenía un año.
Cuando llegan visitantes a la casa, Mino se queda pocos minutos recostada en la entrada. Sin embargo, al rato regresa a recostarse sobre la tumba de Khet, donde permanece hasta horas después de que el Sol desaparezca.
“Siempre entra en casa un par de horas al mediodía y después vuelve a salir, aunque haga mucho sol o llueva. A veces incluso pasa toda la noche”, destacó Ut.
“A veces, coge algo de comida o alguna fruta y la deja junto a la tumba”, agregó Nguyen Thanh Go, padre de Khet.
En la casa vive una niña de 6 años y un niño de 11 meses, ambos hermanos de Khet, aunque Mino no les presta mucha atención.
Un amigo de la familia, les regaló un cobertizo para proteger a Mino del clima, aunque días después lo quitaron porque una pariente reclamó la propiedad del terreno
El próximo marzo, Khet, será trasladado a pocos metros de la casa, aunque aseguran que Mino seguirá esperando a su fiel amigo.