Este medicamento es muy utilizado en veterinaria, por lo que conviene saber su modo de empleo y en qué situaciones se utiliza
La administración de medicamentos a tu perro es uno de los temas más importantes a tener en cuenta, ya que cualquier fallo, por ejemplo en la dosis, puede provocar problemas graves en el organismo de tu perro. Muchas personas han pensado en automedicar a su perro con algún tipo de antibiótico o antiinflamatorio de uso humano y esto es un grave error, especialmente si no se conoce las dosis que debes administrar a tu can, cosa que siempre debe indicarte un veterinario, así como el tiempo que tienes que estar dándole dicho medicamento a tu peludo y cuantas veces al día debes hacerlo.
Qué es y para qué sirve el meloxicam para perros
El medicamento llamado meloxicam pertenece al grupo de los oxicamas, siendo un fármaco antiinflamatorio no esteroideo (AINES) que, al inhibir la síntesis de prostaglandinas (lípidos que intervienen en la respuesta inflamatoria) ejerce a su vez un efecto antiinflamatorio, antipirético, analgésico y antiexudativo.
Si te has preguntado «¿cuándo dar meloxicam a mi perro?», debes saber que este medicamento se suele administrar en casos donde el perro haya recibido un golpe y presente dolor y/o inflamación también predomina su uso antes y después de una cirugía para evitar que se produzca alguna inflamación y también es frecuente en perros que padecen artritis, donde se utiliza como analgésico para evitar que el can sienta molestias. Por ello, es frecuente utilizar este tratamiento a corto plazo y para situaciones que cursen con inflamaciones agudas con dolor moderado.
Dosis de meloxicam para perros – indicaciones generales
Las dosis a administrar a tu can te las indicará el veterinario según su peso. La posología del meloxicam para perros es la siguiente:
- Se comienza el tratamiento con una única dosis de 0,2 mg de este medicamento por cada kg de peso del perro.
- Los días siguientes se administrará una dosis de 0,1 mg por cada kg del perro cada 24 horas, es decir, una sola vez al día.
En la mayoría de casos se observa una mejora en el estado del perro pasados los 4-5 días desde que se inició el tratamiento. Si no se observa ninguna mejoría y han pasado hasta 10 días será necesario suspender el tratamiento, ya que podría producir problemas en su organismo. Si se ha decidido aplicar este medicamento a largo plazo seguramente el veterinario te indique la dosis mínima efectiva para asegurarse de terminar con el problema.
Cómo dar meloxicam a mi perro
El meloxicam, también llamado metacam o meloxivet, entre otros nombres de marcas, normalmente viene en un frasco con jarabe espeso, que se debe agitar bien antes de administrar al perro. Tendrás que dárselo a tu can vía oral junto con comida. Por ello, conviene que tu can haya comido antes para que no resulte agresivo para su estómago, pero también puedes ponérselo encima de su comida y asegurarte de que lo ha ingerido todo.
Además de administrarse en formato líquido directamente en la boca o comida, también se puede administrar en tabletas o intravenoso, lo que decidirá el veterinario según el problema a tratar. Las tabletas no tienen mal sabor por lo que normalmente el can las ingiere sin problemas. De todas formas si ves que la escupe y no se la traga puedes envolverla en un trozo de jamón york o de queso para que no la vea y ofrecérselo. Si la decisión del profesional es aplicarlo inyectado, el propio veterinario colocará una vía a tu perro para poder realizar este proceso él mismo.
Contraindicaciones del meloxicam para perros
El meloxicam tiene una serie de contraindicaciones a tener en cuenta, ya que puede producir problemas si se les aplica a perros no aptos para su administración. Las principales contraindicaciones del meloxicam para perros son las siguientes:
- No usar en perros que tengan los siguientes problemas: Cualquier problema gastrointestinal, problemas hepáticos, renales o cardíacos así como trastornos hemorrágicos.
- No usar en perras en gestación o lactancia.
- Nunca usar en cachorros con menos de 6 semanas.
- Si sabes que tu perro tiene hipersensibilidad a este medicamento debes consultarlo con el veterinario y si no lo sabes estate atento por si presentara algún síntoma de alergia a algún excipiente del medicamento.
Si tu can presenta hipovolemia, deshidratación o tiene la tensión baja, el veterinario decidirá si administrarle este medicamento, ya que puede ocasionar toxicidad renal. Además, si tu perro está tomando algún medicamento también debes indicarlo al veterinario por si dicho medicamento interfiere con el meloxicam.
Efectos secundarios del meloxicam para perros
Este medicamento, en ocasiones, también puede producir efectos secundarios, por lo que deberás acudir rápidamente a tu veterinario si tu perro presenta estos síntomas después de tomar meloxicam. No obstante, algunos solo los puede detectar el veterinario realizando un análisis. Estos son los principales efectos secundarios del meloxicam para perros:
- Pérdida de apetito.
- Apatía.
- Vómitos.
- Diarreas.
- Sangre oculta en las heces.
- Diarreas con sangre.
- Insuficiencia renal.
- Úlceras gastrointestinales.
- Elevación de las enzimas hepáticas.