Todas las viviendas de la isla de Mango quedaron destruidas, solo 2 están de pie en Fonoifua. Las evacuaciones continúan
La erupción volcánica y posterior tsunami del pasado 15 de enero en Tonga, dejó como saldo cerca de 84.000 personas afectadas que representan más del 80% de la población, informó la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El portavoz del organismo, Stéphane Dujarric, precisó durante una rueda de prensa reseñada por EFE que es necesario garantizar el suministro de agua potable y alimentos, así como restablecer las comunicaciones, considerando que la ruptura de un cable submarino dejó al país sin conexiones telefónicas e internet.
El desastre natural cobró la vida de 3 personas y las autoridades prevén que la cifra aumente en medio del desarrollo de las evacuaciones. Aún es complicado realizar una evaluación de los daños.
Dujarric detalló que todas las viviendas de la isla de Mango quedaron destruidas, solo 2 están de pie en Fonoifua.
Destacó que continúan trabajando en el aeropuerto internacional y se espera pueda volver a operar este 20 de diciembre.
Aunque los mecanismos de ayuda están activos, es complicado llegar a las zonas remotas para apoyar a la población.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) enviará agua potable y ayuda a través de un buque de la Marina australiana que tiene previsto zarpar el 21 de diciembre.