El curioso hecho sucede en Taiwán, donde los padres hacen cualquier cosa para evitar que los adolescentes salgan de casa
Una madre de la localidad taiwanesa de Kaohsiung, ordenó en una peluquería hacer un corte de cabello ridículo a su hijo de 15 años para evitar que salga a la calle y se contagie de COVID-19.
Según reseñó el portal Mothership, el pasado mayo la fémina informó a su hijo de la decisión hasta que finalmente cumplió con la promesa, considerando la nueva ola de contagios que enfrenta la región y llevó al Gobierno a reforzar las medidas de bioseguridad.
En concreto, la madre solicitó al peluquero que le hiciera a su hijo un corte vergonzoso. En principio pensaron en hacerle la inscripción «COVID-19», pero por considerar la medida como poca efectiva le raparon la mitad de la cabeza.
El adolescente molesto por el resultado, discutió y se molestó con su madre al sentirse avergonzado.
Gracias a la cobertura mediática del caso, el peluquero comenzó a recibir numerosas solicitudes de padres para hacer el mismo trabajo a sus hijos rebeldes.
En respuesta, la peluquería lanzó una promoción llamada «cortes preventivos por coronavirus» gratuitos, destinados para adolescentes de entre 12 y 15 años a quienes no les gusta permanecer en casa.