Carreteras cortadas, escuelas cerradas y embalses en nivel de alerta de desborde, son algunos de los estragos de las fuertes lluvias
Las fuertes lluvias que azotaron Puerto Rico este fin de semana, causaron graves inundaciones y daños materiales. Se estimó una acumulación de hasta 15 pulgadas y las autoridades aún analizan si emitir o no el estado de emergencia.
Según reseñó EFE, el panorama se traduce en carreteras cortadas, escuelas cerradas, embalses en nivel de alerta de desborde e interrupciones en el sistema eléctrico. Sin embrago, hasta el momento no hay reporte de víctimas.
El medio constató en un recorrido que una de las zonas afectadas es la barriada de Juana Matos en el municipio norteño de Cataño. Las autoridades mantienen bloqueado el paso, donde hay una camioneta averiada flotando en medio de las aguas, mientras los residentes tienen que movilizarse a pie.
Toa Baja, Vega Alta y Dorado, son otros de los municipios afectados, todos ubicados en la costa Norte de la isla.