El objetivo es avanzar en el tratamiento de los abusos sexuales a menores; así como acabar con esta “herida profunda y dolorosa que debe ser curada”
Este jueves, 16 de julio, el Vaticano publicó un manual para aclarar a sus sacerdotes en todo el mundo qué hacer en caso de tener constancia de abusos sexuales a menores; una medida con la que se quiere ayudar a tratar y atajar estos escándalos.
El documento se esperaba desde que terminó la cumbre sobre los abusos; donde el papa Francisco convocó en febrero del 2019 a las conferencias episcopales de todo el mundo.
Se trata de una lista de pautas de carácter técnico que indican los procedimientos que deben seguirse en caso de recibir o conocer una denuncia de abusos sexuales a menores; para lo que se repasa la legislación ya vigente en la actualidad en la Santa Sede.
En la introducción del documento, resaltan que el objetivo es avanzar en el tratamiento de los abusos sexuales a menores; así como acabar con esta “herida profunda y dolorosa que debe ser curada”.
El prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Luis F. Ladaria Ferrer, detalló que la intención es ayudar a los miembros del clero en todo el mundo en la delicada tarea de gestionar estos casos, que a veces afrontan con incertidumbre sobre la praxis.
El manual no es normativo ni legal
Destacaron que el manual no es normativo; sino para apoyar a los entes eclesiásticos a “comprender y a cumplir de la mejor forma las exigencias de la justicia” sobre esos delitos.
El secretario de la Congregación, Giacomo Morandi, apuntó que el escrito “no promulga ninguna nueva norma”; pero que la verdadera novedad es que “por primera vez el procedimiento se describe de forma organizada”, desde la denuncia hasta el juicio.
Cabe destacar, que el manual está sujeto a futuras actualizaciones en función de eventuales cambios legislativos en el Vaticano o a las peticiones que se puedan recibir por parte de los clérigos.
Asimismo, Morandi lamentó que el fenómeno de los abusos “está presente en todos los continentes”; como han demostrado los casos de Chile, Estados Unidos, Australia, por ejemplo; y la Santa Sede aún recibe “denuncias de hechos antiguos” y recientes.
