Las festividades serán realizadas de forma virtual debido a la pandemia, se desarrollarán dos ceremonias para la jornada de este viernes
Este 11 de septiembre miles de ciudadanos en Venezuela celebran el día de la Virgen de Coromoto. Se conmemoran 368 años desde su aparición.
Para este año 2020, las festividades serán realizadas de forma virtual debido a la pandemia, según informó el portal Vatican News, se tiene programado que en la jornada de este viernes se desarrollen dos ceremonias: Una misa a las 8 de la mañana en la Parroquia de la Coronación y la solemne Eucaristía a las 11 de la mañana en el Santuario Nacional.
Las celebraciones serán coordinadas por la propia Diócesis de Guanare y la Arquidiócesis de Maracaibo.
«En esta ocasión la madre irá a buscar a sus hijos, ya que la pandemia no permite las reuniones. Las plataformas digitales serán nuestro punto de encuentro con la Señora de Coromoto. No importa dónde estés, nos vemos en Guanare. Este es el tema elegido», comentó el obispo de Guanare, José de la Trinidad Valera Angulo.
Historia
La Virgen de Coromoto apareció por primera vez en el año 1651, cuando el cacique Coromoto junto con su esposa, contempló asombrado a la orilla de un río a una señora que los miraba con una expresión amable en su rostro. Esta mujer, la cual llevaba un niño en brazos, le dijo al cacique en su idioma: “Sal del bosque junto con los tuyos. Ve donde los blancos para que reciban el agua sobre la cabeza y puedan entrar en el cielo”.
Se dice que el jefe indígena obedeció el mandato y fue con su tribu para ser instruido en la fe cristiana. No obstante, el Cacique Coromoto no se acostumbró y decidió retornar a su aldea con su familia.
Para el 8 de septiembre de 1652, la Virgen hizo su segunda aparición, pero en esta ocasión Santa María de Coromoto apareció justo en la choza del Cacique, quien trató de sacarla de su vivienda. Cuando el indígena intentó tocarla, la mujer desapareció, haciendo que el Cacique quedara con su puño cerrado. Al abrir su palma, el indígena Coromoto vio que una pequeña estampa se había quedado en su mano, la cual tenía grabada la imagen de la Virgen.
Luego de esta nueva aparición, el cacique se fue al bosque, lugar donde se presume que fue mordido por una serpiente venenosa; posteriormente volvió a Guanare y pidió ser bautizado.
Para venerar a la Virgen, se construyó un templo en el lugar de su segunda aparición, el Santuario Nacional Nuestra Señora de Coromoto, consagrado el 7 de enero de 1996 e inaugurado, en la solemne Eucaristía presidida por el Papa Juan Pablo II, el 10 de febrero de 1996.
Fuente: El Nacional