108 fueron arrastradas con lanchas a aguas profundas, mientras que alrededor de 380 fallecieron en la orilla de la isla de Tasmania
Las últimas 20 ballenas de 500 aproximadamente que quedaron varadas en la isla de Tasmania al sur de Australia, fueron rescatadas este 26 de septiembre.
Según medios locales, las autoridades informaron que 108 cetáceos fueron salvados durante los últimos 5 días mediante su arrastre hacia aguas profundas con la ayuda de lanchas.
El gobierno de Tasmania, informó a través de un comunicado que «se cree que ya no quedan ballenas vivas en el puerto» y ahora deben sumar esfuerzos para retirar los cuerpos de las 380 ballenas que lamentablemente murieron, cuando mejoren las condiciones climáticas
Tienen previsto arrastrarlas a alta mar debido a que representan un peligro para la navegación.
«Esta tragedia medioambiental comenzó al principio de esta semana cuando las autoridades avistaron las primeras 270 ballenas piloto, mientras que otras 200 fueron halladas muertas el miércoles en puntos separados entre 7 y 10 kilómetros», reza el documento reseñado por EFE.
Los cetáceos que pueden llegar a medir más de 6,7 metros y pesar 2,5 toneladas, mueren durante el varamiento por estrés, cansancio o falta de oxígeno.
Se trata del varamiento más grande de la historia de Australia. El último, fue de 200 ballenas en la bahía de Macquarie.
Las ballenas piloto de aleta larga, son una especie de cetáceo protegida, se estima que hay casi 200.000 ejemplares en el Atlántico norte y en las aguas oceánicas sureñas que rodean la Antárdida.
Los científicos aún no determinan la causa del hecho, aunque manejan la hipótesis de extravío por contaminación sonora.