Ante el estallido solar de M4.4 del pasado 29 de noviembre, los científicos rusos fueron abordados con esta inquietante pregunta
«Es extremadamente improbable» que el Sol explote porque su comportamiento, es verificado constantemente, aseguró para Sputnik el director del Instituto de Investigación Espacial de la Academia Rusa de Ciencias, Anatoli Petrukóvich.
El pasado 29 de noviembre, los detectores de radiación de rayos X -que operan en la órbita- registraron un estallido solar de M4.4, el cuarto más alto de los 5 posibles.
Se trató de la erupción más fuerte desde 2017, aunque los expertos aseguraron que la estrella de la Tierra no está en peligro.
Petrukóvich explicó que la explosión de una estrella cercana, sí podría causar un impacto externo catastrófico en el Sol.
«No obstante, ocupamos un lugar tranquilo en la galaxia, en nuestro entorno, las supernovas son extremadamente raras. Las estrellas más cercanas a nosotros que teóricamente podrían explotar están a decenas de años luz de distancia. Son gigantes azules, y todos están aún lejos de explotar», manifestó para la agencia de noticias.
El experto agregó que cualquier predicción sobre la destrucción del Sol, no se basará en argumentos científicos.
«Del mismo modo podríamos asumir, por ejemplo, que los malvados alienígenas aparecerán y nos conquistarán. Conocemos un gran número de opciones cuando las estrellas explotan, pero ninguna es nuestro caso», sentenció.
