Fotógrafos de Canon hacen una maravillosa recopilación digital de momentos únicos que inmortalizan un año sin precedentes
Bajo el lema See How We Feel (Vea cómo nos sentimos) fotógrafos del Programa de Embajadores de Canon EMEA, recopilaron 20 fotografías que representan el impacto emocional de las personas en medio de un año desolador como el 2020.
Amor, del fotógrafo británico de deportes, Eddie Keogh. Capturó el momento de complicidad entre la cuidadora Lucy Skidmore y su bisabuela y además residente del hogar de ancianos, Joan Loosley.
Skidmore se quedó laborando de manera permanente en Princes Risoborough para evitar ser portadora del nuevo coronavirus en su trabajo.
Conexión, de la artista visual y directora de arte checa, Eliška Sky. Su fotografía representa una especie de máscara conectada que refleja la unidad del ser humano en medio de la crisis sanitaria.
Gratitud, del biólogo marino y fotógrafo, Audun Rikardsen. En plena noche polar en los fiordos del norte de Noruega, inmortalizó a una ballena.
Manifestó sentirse agradecido por esta imagen, luego de haber seguido por 10 años el “banquete de las ballenas”.
Optimismo, del fotógrafo italiano de bodas, Fabio Mirulla, quien hizo historia al tomar una fotografía del cometa Neowise que volverá a ocurrir hasta dentro de 6.000 años aproximadamente.
Resiliencia, del fotógrafo Sanjay Jogia, quien manifestó que a pesar de su discapacidad y múltiples obstáculos en cuanto a la organización de su boda, la mujer cumplió su sueño el pasado septiembre.
Esperanza, de la fotógrafa documental germano-rusa, Nanna Heitman. Toma la imagen del primer encuentro entre una madre y su hijo tras una complicada cesárea.
Dentro de esta categoría, también está la imagen de Bruno D’Amicis de un oso pardo de los Apeninos, saliendo en invierno de su refugio.
Esto sin contar la foto de Clement Kiragu sobre la migración de millares de ñus durante más de tres horas y la de Muhammed Muheisen, quien capturó a un bebé de 26 días en un campamento en Atenas.
Incertidumbre, de Jérôme Sessin. Compartió la imagen de un túnel fronterizo entre el Alto Rin y los Vosgos, cuando volvía desde Mulhouse durante la cuarentena.
También está la foto de Pavel Volkov, quien reflejó los efectos del conflicto militar en Artsaj.
Libertad, Guia Besana con esta imagen refleja el sentimiento de escape que sienten muchas personas, luego de un largo y permanente aislamiento.
Paciencia y Contención, Maxime Aliaga capturó a un leopardo en representación del esperado sentimiento de reanudación de la vida social.
Michel d’Oultremont, también reflejó el mismo sentir con la foto de un gorrión que estaba a tan solo cinco metros del portal de residencia.
Vacío, de Lorenz Holder, quien desde el balcón de su vivienda capturó la imagen de una persona corriendo, mostrando el desolador ambiente que deja la pandemia.
En la misma tónica, Vladimir Rys fotografió las gradas vacías de la pretemporada en el circuito Barcelona- Catalunya.
Tranquilidad y grandeza, del fotógrafo de viajes y filmmaker de documentales, Joel Santos. Con su fotografía de niños mundari en Sudán, representó la paz y el equilibrio en un mundo frágil, reforzando la idea de que nada puede darse por hecho.
Pie Aerts, eligió a África para fotografiar una familia de elefantes en busca de agua durante el final de la estación seca; imagen que deja ver la grandeza de la naturaleza ante la ausencia de la intervención humana.
Soledad, Tasneem Alsultan, hace una reflexión sobre la confusión que este 2020 trajo a las personas, fotografiando a las 10 de la noche a un hombre frente al histórico monumento de Mada’in Salem.
