Se trata de una cifra récord, vinculada a la aparición de la nueva cepa del SARS-CoV-2 en la nación que es hasta 70% más contagiosa
Reino Unido registró este 28 de diciembre, la cifra récord de 41.385 nuevos casos de COVID-19, tratándose de la más rápida propagación del nuevo coronavirus, teniendo en cuenta la mutación del SARS-CoV-2 en el país.
“Este altísimo nivel de infección es una preocupación creciente en un momento en que nuestros hospitales son más vulnerables”, advirtió la directora médica de Salud Pública de Inglaterra, Yvonne Doyle, según reseñó Reuters.
El primer ministro británico, Boris Johnson y sus asesores científicos, aseguraron que la nueva cepa del SARS-CoV-2 es hasta 70% más contagiosa, aunque aún no hay evidencia sobre su mortalidad.
Ante este panorama, el país adoptó medidas sanitarias más estrictas al igual que muchos países del mundo en su mayoría europeos.
Reino Unido aumentó su capacidad de pruebas desde la primera oleada de COVID-19 en la primavera boreal, pasando de 100.000 diarias a finales de mayo a 500.000 el pasado 23 de diciembre, última fecha de publicación de datos.