¿Alguna vez te has preguntado si quieres pasar tu vida entre las nubes? ¿O si deseas vivir una experiencia, dónde te sientas libre y flotando
Si eres amante de los deportes extremos, tienes que vivir la experiencia de volar en parapente y aprender todo sobre este deporte de aventura.
A finales del siglo XX, unos montañeros tuvieron la grandiosa idea de bajar volando mediante paracaídas desde la cima de una montaña, a partir de ahí, se originó el deporte del parapente.
Hay que acotar, que los parapentistas salen desde una montaña, con respecto a esto, José Ángel Rodríguez, parapentista venezolano conocido como “Nova” de 25 años de experiencia ,expresó: “Despegamos siempre de una montaña, pasear en parapente es muy seguro, aterrizas con mucha seguridad, siempre y cuando tengas un buen piloto a tu lado”.
Rodríguez, también explicó cómo funciona la ciencia de volar parapente, que se basa en las corrientes térmicas y en las corrientes dinámicas, ante esto aseguró que: “El parapente tiene una forma de ala de avión, el viento cuando pasa por arriba y por debajo hace un diferencial, eso hace que la fuerza sea ascendente, nosotros volamos en unos ríos de aire llamados térmicas que se crean en el piso donde pega el sol y sube hasta la nube, los parapentistas van de térmica en térmica para poder volar”.
Para volar, también es importante seguir con todas las medidas de seguridad y utilizar todos los equipamientos adecuados, ante esto el parapentista Renee Gudiño, manifestó que se deben utilizar “cascos, sillas con su paracaídas de emergencia, brújula, barómetro, radios trasmisores, entre otros implementos, para que el viaje sea seguro”.
Las anteriores medidas deben utilizarse, ya sea en un vuelo Tándem, vuelo de dos personas, o en un vuelo de competencia.
El parapente, al ser un deporte, tiene la opción de realizar competencias: “La competencia consiste en hacer una ruta lo más rápido posible por un periodo de tiempo, donde todos los competidores salen a la misma hora, con el uso de GPS, y el que haga la ruta más rápido, gana”, así lo manifestó Gerson Avendaño, parapentista de 26 años de experiencia, en el “Open Yaracuy 2020”.
Además, existe en la competencia normas que se deben cumplir en el aire, lo cual resulta importante en cuanto al factor seguridad y permite evitar incidentes. Avendaño, nos habló sobre algunas reglas: “cuando dos pilotos se encuentran de frente se gira a la derecha, los días pares se gira a derecha, los días impares a la izquierda, si no se cumplen esas reglas es peligroso, igualmente, se recomienda hacer su mejor aterrizaje y despegue, sin inventar hacer marionetas”.
Es importante resaltar, que si una persona desea ser parapentista, debe someterse a una teoría física y mental, donde aprenderá varias técnicas, entre ellas la de despegue, manejar el ala, volar y aterrizar, luego de aprender estas técnicas durante dos semanas, el parapentista podrá volar, y poco a poco incrementará la distancia del vuelo gracias a la práctica.
En Venezuela, existen diferentes escuelas que se pueden encontrar en la página web de Fedevip (Federación Deportiva Venezolana de Ícaros y Parapentes), entre ellas están las escuelas de La Puente y Nirgua, así lo aclaró Francisco González, Presidente de Fedevip, en el “Open Yaracuy 2020”, donde aseguró que “en Venezuela se puede volar en todos lados, desde las montañas, las playas y el llano, gracias al clima de nuestro país”.
Jennifer Ochoa, la única mujer que realiza parapente en Venezuela de forma profesional, invita a las mujeres a que se unan y disfruten de este deporte extremo: “Prueben, hagan su curso y sigan las normas del deporte del parapente, este deporte es conexión con la naturaleza, es ver desde las alturas la creación de Dios, para mí es una meditación donde disfrutas del paisaje”.
Así mismo, el parapentista Miguel Suarez, afirma que el parapente es un estilo de vida, porque toda tu vida lo unes a esta práctica: “Si te sientes triste, si te sientes alegre, si quieres celebrar tu cumpleaños, vas a volar parapente”.
Además, aseguró que cuando vuelas la primera vez, vas a querer repetir esta experiencia, ya que: “Ningún vuelo se va a parecer a otro, cada vuelo es único y diferente, aunque hayas tenido mil vuelos, el mil uno no se va a parecer a los anteriores”, para finalizar, nos dejó una reflexiva frase: “Que no se les vaya a pasar la vida, sino que la vida les pase volando pero en parapente”.
Nota de Prensa: María Marina Mulder / @mariamarinamm