Salir de la zona de confort o de la rutina, impide a muchas personas arriesgarse. Si este es tu caso, lee esta nota
Si eres de las personas que está cansada de trabajar para beneficiar a terceros o simplemente deseas tener un ingreso extra, pero no te decides a emprender por miedo al fracaso, despreocúpate porque la sensación es normal, cuando te enfrentas a lo desconocido y en esta oportunidad te diremos cómo comenzar tu propio negocio.
Organízate: Céntrate en analizar tus capacidades, habilidades, fortalezas y virtudes para determinar cuáles puedes monetizar, haciendo un estudio de mercado con el fin de comprobar que la idea sea viable o rentable.
Crea el proyecto: Aunque parezca innecesario llevar al papel tu proyecto porque ya lo tienes en mente, te equivocas. Escribirlo, te permitirá brindar una mayor estructura a tu negocio.
Inversión: Realiza una estimación de gastos sobre lo que necesitarás para tu negocio para que al momento de comenzar, no te genere pérdidas.
El contacto con proveedores y la estimación del precio de los rubros a ofertar, deben ser calculados con rigurosidad, al igual que la posibilidad de uno o varios socios.
Aprovecha la tecnología: Para tener un primer acercamiento con tus clientes, utiliza las redes sociales y WhatsApp para dar a conocer tu emprendimiento. No dejes pasar las ofertas para enganchar a los primeros compradores.