Algunos pacientes después de estar inmóviles también desarrollan rigidez o dolor
La pandemia de covid-19 se mantiene como una emergencia a nivel mundial. Las personas que han sido contagiados pasan semanas y meses después de haber pasado la enfermedad, siguen teniendo síntomas. Es lo que se conoce como covid persistente o “long covid” en inglés.
Conforme a los señalamientos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el covid persistente es la presencia de signos y síntomas que aparecen durante y después de la infección y continúan durante un periodo de 12 semanas o más. La debilidad y la pérdida de condición física se encuentran entre los problemas más comunes. Algunos pacientes después de estar inmóviles también desarrollan rigidez o dolor.
Estos pacientes también pueden tener otros síntomas y secuelas, como respiración corta o sensación de falta de aire, dolor de pecho, tos, fatiga extrema, exacerbación después de esfuerzo físico, problemas de memoria y concentración, mareo, sensación de desmayo y palpitación del corazón. La persistencia de estos síntomas impacta en la vida social, laboral y en las actividades cotidianas de las personas afectadas.
Un fisioterapeuta es esencial y clave para la recuperación de este paciente que presenta la sintomatología de covid persistente. Ellos se ocupa de que el paciente reanude sus actividades de la vida diaria de una manera conservadora, a un ritmo adecuado, seguro y manejable dentro de los síntomas que la persona esté experimentando. De tal forma, que cualquier esfuerzo no lo lleve al punto de fatiga o empeoramiento de los síntomas.
El doble beneficio de la fisioterapia se encuentra no sólo en el tratamiento de dolencias o patologías existentes sino también en su acción preventiva de lesiones.