Mientras algunos advierten sobre su uso para la dominación, otros la ven como la oportunidad de alcanzar -entre otras cosas- la vida eterna
Para unos la Inteligencia Artificial (IA) se utiliza para la vigilancia y el control social, fenómeno que gana auge cada día a nivel mundial, mientras que otros la consideran como una excelente herramienta para transformar la humanidad de forma positiva, haciendo énfasis en la era «poshumana».
De acuerdo a un estudio del Fondo Carnegie para la Paz Internacional (The Carnegie Endowment for International Peace) cerca de 75 países de los 176 analizados, utilizan IA para monitorizar, seguir y vigilar a sus ciudadanos, como el caso de China, líder en tecnología de reconocimiento facial.
Las empresas, se aprovechan de las ventajas de la IA para mejorar el procesamiento y análisis de datos, llegando incluso a utilizar esta tecnología con fines policiales, “algunos legales, otros que violan los derechos humanos”, reza la investigación.
Huawei, Hikvision, Dahua y ZTE, son algunas de las compañías chinas que proporcionan servicios de vigilancia a base de IA a 63 naciones.
Incluso, muchas veces la compra se realiza a través de préstamos blandos para alentar a los países pobres como Kenya, Laos, Mongolia o Uganda a comprarla.
Sin embargo, China no es el único país que distribuye esta tecnología, Estados Unidos (EEUU) también encabeza la lista teniendo presencia en 32 naciones.
The Carnegie Endowment for International Peace, detalló en su informe que IBM lidera el ránking con presencia en 11 países, seguida de Palantir y Cisco.
Francia, Alemania, Israel o Japón, “también juegan un importante rol en la proliferación de esta tecnología”.
Pese a este panorama de advertencia sobre la IA, José Luis Cordeiro de la Singularity University de Silicon Valley, es uno de los tantos expertos que defiende su uso y vaticina un futuro increíble.
“En las próximas dos décadas veremos más transformaciones para la humanidad que en los últimos dos milenios. Todavía no hemos visto nada de lo que viene”, manifestó en una entrevista para La Vanguardia.
A su juicio pronto se verá el «fin de la especie humana y todo lo que conocemos. Viene la edad poshumana”, donde se convivirá con robots e incluso los seres humanos serán máquinas.
“Nos vamos a fusionar con la tecnología”, reiteró, haciendo referencia a que los niños nacerán conectados a la red con «cerebros internacionales compartidos» capaces de descargar conocimientos.
En concreto Cordeiro no comparte las teorías catastróficas sobre el uso de la IA, no cree que las máquinas sean capaces por ejemplo de acabar con los puestos del trabajo de los humanos, sino todo lo contrario, brindaría la oportunidad a las personas de autorealizarse personalmente.
«En cualquier crisis hay dos factores: El peligro y la oportunidad», sentenció.
“Ya podemos visualizar la muerte de la muerte”. “Yo no pienso morir”, confesó, al tiempo que aseguró ser parte de la última «generación humana mortal o la primera inmortal” porque -entre otras cosas- la medicina del futuro “no va a curar, va a prevenir” y a «vencer al envejecimiento”.
Para él, la IA abre el camino para vivir miles de años con grandes avances tecnológicos a la mano que acabarán con la pobreza y el analfabetismo.