Científicos aún se preguntan porqué la especie -que supera los 100 años de antigüedad- desarrolló rasgos tan complejas
Al noreste de China, se halló el fósil de una ave de 120 millones de años de antigüedad que llamó la atención de los científicos por el extravagante conjunto de plumas de la cola.
Los expertos creen que el fósil -bautizado como Yuanchuavis Komps- perteneció a un dinosaurio emplumado que tenía aproximadamente el tamaño de un arrendajo azul.
«Este nuevo descubrimiento demuestra vívidamente cómo la interacción entre las selecciones naturales y sexuales dio forma a las colas de las aves desde su historia más temprana. Yuanchuavis, es la primera aparición documentada de un pintail en Enantiornithes, el grupo más exitoso de aves mesozoicas», indicó el investigador Wang Min, según reseñó Sputnik.
Detalló que Yuanchuavis Komps, cuenta con dos plumas extensas, acompañadas de otras más cortas en forma de abanico. Se extienden cerca de 30 centímetros y abarcan aproximadamente 1,3 veces más que el cuerpo del animal.
Se presume que la cola era utilizada para la etapa de apareamiento con el fin de atraer pareja. Caso parecido a las especies modernas de suimangas y quetzales.
Sin embargo, el aspecto de una cola larga y elegante trae más desventajas que ventajas porque el ave se hace más llamativa para los depredadores.
«La complejidad que vemos en las plumas de Yuanchuavis está relacionada con una de las razones por las que planteamos la hipótesis de por qué las aves vivas son tan increíblemente diversas, porque pueden separarse en diferentes especies simplemente por las diferencias en el plumaje y las diferencias en el canto», agregó el paleontólogo y uno de los autores de la investigación, Jingmai O’Connor.
Hasta ahora no se ha encontrado en el mundo una ave con la mezcla de cola en abanico y plumas emparejadas en la cola.
Aún se desconoce la causa de la evolución del ave que adquirió una característica bastante compleja, aunque se cree se debió a la densidad de los bosques.