Se establece esta medida con el fin de frenar la propagación del COVID-19. Los trabajadores que incumplan no recibirán remuneración
Para ingresar a El Vaticano, es obligatorio presentar un pase verde o green pass a partir de este 1 de octubre, informó la Santa Sede a través de un comunicado.
La medida quedó establecida mediante un decreto firmado por el secretario del Estado vaticano, Pietro Parolin con el fin de frenar la propagación de la pandemia del COVID-19.
«Todos los empleados de la Curia Romana y de las Instituciones relacionadas con ella están obligados a poseer un certificado de vacunación» o de «negatividad al coronavirus, expedido en Italia tras una prueba molecular o antigénica rápida», reza el documento.
El nuevo reglamento también se «extiende a los colaboradores externos y a quienes, por cualquier otro motivo, trabajan para la Institución, al personal de empresas externas y a todos los visitantes y usuarios».
El Vaticano aclara que quienes no cumplan con las normas establecidas podrán entrar a su «lugar de trabajo».
«En este caso, se considerará que el trabajador está ausente de forma injustificada, sin remuneración, sin perjuicio de las retenciones de la seguridad y la asistencia social y de la ayuda familiar», reseña el texto.