Este tipo de expresión del ser humano, utilizada en determinados momentos, es muy diversa acústicamente de lo que se pensaba
Los gritos de los seres humanos además de miedo, pueden transmitir dolor, ira, placer, tristeza y alegría, reveló un estudio publicado en la revista PLOS Biology.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores pidieron a 12 participantes que vocalizaran gritos positivos y negativos, provocados por diversas situaciones.
De este modo, determinaron su naturaleza emocional clasificándolos en diferentes categorías, mientras los sometían a imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI).
Según los expertos lo más relevante, fue que los oyentes respondieron más rápido, con mayor precisión y sensibilidad neuronal a los gritos positivos, especialmente a aquellos menos alarmantes que generaron actividad alta en muchas regiones cerebrales auditivas y frontales.
El hallazgo demuestra que los gritos son más diversos de lo que se imaginaba