Dichas denuncias se expusieron durante la gestión de Arquímedes Hidalgo y del actual gobernador Ángel Marcano
El presidente del Movimiento 7 La Voz Alcasiana, y miembro de la Coalición Anticorrupción en Bolívar, Javier Torres, anunció que planifican ir a Caracas para hacer entrega de las pruebas de cada una de las denuncias hechas por irregularidades en CVG Alcasa, y solicitar que se aplique el operativo Mano de Hierro para los responsables de la debacle de esta y más industrias en la región.
“Si investigan al PSUV en Bolívar se quedarán sin militancia”, señaló Torres, en relación a los presuntos vínculos de altos funcionarios gubernamentales y de las empresas básicas, con cada una de las denuncias que reposan en los archivos de instituciones como el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Fiscalía, Inspectoría del Trabajo y la Defensoría del Pueblo.
Dichas denuncias se expusieron durante la gestión de Arquímedes Hidalgo y del actual gobernador Ángel Marcano, como presidentes de Alcasa. Sin embargo, no hubo respuesta por parte de ambos, tampoco una investigación concluyente por parte de las instituciones competentes.
Además de la reductora de aluminio, existen denuncias de corrupción en el resto del holding CVG. Estas incluyen la persecución, acoso y despidos injustificados, principalmente a los que han denunciado públicamente estas irregularidades.
Torres hace mención, sobre un video grabado el 20 de diciembre de 2020. En el mismo se muestra una gandola con estructuras de celdas que salía de la empresa sin la respectiva guía de despacho. También el caso de unas bobinas que desaparecieron sin explicación.
La denuncia fue puesta en Fiscalía y la investigación quedó a cargo de los fiscales Danny Zambrano y Fernando Betancourt. Torres destacó que casualmente cuando comenzaron con las investigaciones, al primero lo destituyeron, y al segundo lo detuvieron bajo la acusación de corrupción.
Las averiguaciones nunca avanzaron y fueron archivando cada denuncia en la Fiscalía Cuarta contra la Corrupción.
Contó además que antes de las elecciones de gobernadores y alcaldes, acudieron al despacho del exfiscal superior de Bolívar, Manoel Gil Da Silva, detenido recientemente por presunto tráfico de combustible. Nunca los atendió.
“Estuvimos toda la mañana esperándolo. Cuando salió le dijimos que, por favor, nos atendiera porque teníamos denuncias de irregularidades en CVG Alcasa. Nos miró y se fue. Allí nos dimos cuenta que había conchupancia de estas instituciones con lo que ocurre en las empresas básicas”, finalizó Torres.