Cómo hacer un delicioso arroz con leche casero, fácil y rápido

Si eres de los que no te lanzabas a cocinar esta receta dulce por miedo a que no te quedara bien o pensabas que era complicada, no te pierdas este artículo

Este postre es una de esas recetas tradicionales que gusta a todos, pues muchos grabamos con cariño el arroz con leche de la abuela o el que comíamos en casa, pero puede que muy pocos se atrevan a hacerlo por pensar que es un postre difícil de hacer .

Ingredientes:

  •  1 litro de leche
  •  150 gramos de azúcar
  •  110 gramos de arroz redondo
  •  1 rama de canela
  •  Cáscara de limón o naranja (sin la parte blanca para que no amargue)
  •  Canela molida al gusto

Necesitarás:

  •  Una olla.
  •  Una cuchara de madera.
  •  4 recipientes individuales o uno grande.

Pasos a seguir para hacer esta receta:

1: Para empezar con la preparación de este arroz con leche fácil, necesitas una olla o recipiente lo suficientemente grande como para verter un litro de leche. Vierte la leche en el recipiente escogido y pon el fuego a potencia media-alta. Añade la rama de canela y la cáscara de limón y espera a que la leche se temple un poco antes de añadir el arroz. El toque de canela y limón o naranja le aporta un toque aromático y un sabor exquisito a la leche.

Si la leche es entera, contribuirá a que el resultado sea más sabroso y cremoso, pero también puedes usar leches vegetales si quieres hacer un arroz con leche vegano y sin lactosa.

Un delicioso y económico manjar

2: Cuando la leche esté templada, añade el arroz a la olla y remueve con una cuchara de madera para ayudar a que los granos de arroz suelten el almidón. Espera a que la leche hierva. Te aconsejamos utilizar arroz redondo ya que, al tener más almidón, obtendrás un arroz con leche más cremoso. Además, este arroz tiene mayor capacidad para absorber el sabor de los demás ingredientes. Si prefieres que el grano quede más firme, puedes utilizar el tipo de arroz que se utiliza para los risottos.

3: Una vez que empiece a hervir, debes bajar el fuego a una potencia media-baja y remover de vez en cuando. Uno de los trucos más importantes para que el arroz con leche tradicional quede cremoso es moverlo frecuentemente.

4: Pasados 20 minutos, añade el azúcar poco a poco y muévelo para que se integre bien con la leche. Continúa removiendo cada poco tiempo. No debes añadir el azúcar antes de este paso, ya que el grano no estará en su punto. Si lo añades antes, corres el riesgo de que se caramelice y que el arroz se pegue al recipiente. Otra opción es hacer arroz con leche condensada. En este caso, puedes sustituir el azúcar por leche condensada para darle un toque más cremoso y dulce.

5: Una vez añadida el azúcar, tienes que esperar 25 minutos más para asegurarte de que el arroz está tierno. Pasado este tiempo, apaga y retira del fuego.

6: Saca la rama de canela y la piel de limón con ayuda de una pinza o un tenedor. Deja que se enfríe antes de servir.

7: Una vez templado, sirve en raciones individuales o en un cuenco grande, como prefieras. Para finalizar, espolvorea canela al gusto sobre el arroz con leche justo antes de servirlo. No la eches antes, pues se humedecerá y no tendrá la misma textura.

Consejos

  • Si quieres darle un toque diferente, en lugar de canela, espolvorea un poco de azúcar por encima y quémala con un soplete o quemador de cocina. Quedará una costra crujiente irresistible.
  • Para aromatizar la leche, puedes utilizar, en lugar de canela, otras especias como pueden ser clavo, anís estrellado o cardamomo.
  • ¿Sabes que el arroz con leche asturiano lleva un poco de anís dulce en la leche para darle un toque diferente?
  • Puedes servir el arroz con leche templado o frío, a partir de tu gusto.
  • Lo ideal es hacer el arroz con leche a fuego medio-bajo, de esta forma evitas que se pegue y el resultado es un arroz más cremoso.
  • El arroz con leche se conserva en la nevera por lo que, al enfriarse, este absorbe gran parte de la leche. Si te gusta el arroz algo más caldoso, puedes añadir un poco más de leche cuando lo vayas a comer y remover un poco. Verás cómo el arroz recupera su cremosidad.

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