Los churros se hicieron parte de la cocina de muchos venezolanos, a pesar de que la receta es de origen Europeo
Son unos palitos de masa que se fríen en aceite muy caliente, hasta que están crujientes, listos para rociarles azúcar con canela en polvo por encima o simplemente acompañarlos con cualquier sirope, café o un rico chocolate caliente.
En este caso les traigo la receta más sencilla pero a medida que se acople al bolsillo se le pueden agregar otros ingredientes, igual quedan riquísimos de cualquiera forma.
Su preparación es sencilla y solo necesitarás una manga con boquilla de estrías para dar la forma, pero no te preocupes, sino la tienes igual sirve sin boquilla saldrán solo tubitos y serán igual de ricos.
Ingredientes:
- 500 g de harina de trigo todo uso.
- 650 ml de agua o (leche) opcional
- 6 g de sal.
- 3 huevos
- 3 cucharadas de aceite o (mantequilla) opcional
- Aceite para freír
- Azúcar
- Canela en polvo (opcional)
- Leche condensada para acompañar (opcional).
preparación:
- Coloca en una olla el agua o (leche) a hervir, cuándo esto suceda, se vierte el aceite o la mantequilla y la sal.
- Echamos de golpe la harina y mientras; revolvemos constantemente hasta que la masa despegue de las paredes de la olla, y desaparezcan los grumos.
- Cuando veas que se va formando una masa, aparta del fuego y continúa mezclando integrándole los huevos hasta que esté homogéneo.
- Deja reposar por 5 minutos y aún tibia coloca la masa en la manga pastelera antes de que endurezca, suele pasar rápido; por eso es tan importante que lo hagas, aun estando caliente.
- Coloca en un plato aceitado los churros que vayas cortando, mientras se calienta el aceite para freír.
- Coloca de 3 a 4 churros por tanda en el aceite para no disminuir su temperatura, ten cuidado porque suele saltar un poco.
- Cuándo ya estén dorados, sácalos y colócalos en papel absorbente.
- Espolvoréalos con azúcar y canela aun estando tibios para mejor adhesión.
Listo, Listo; ya así serán súper deliciosos. Si deseas acompañar con algún topi de chocolate puedes hacer una mezcla de cacao en polvo, con esencia de vainilla al gusto, 1 taza de agua, ¾ de azúcar y una pizca de sal mezclada a fuego lento para untarlos con chocolatico o si prefieres simplemente con leche condensada.
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Son una verdadera delicia y nos encantan a la hora de merendar.