La nación enfrenta un duro verano que suma hasta la fecha más de 200 animales del sector ganadero, muertos de sed
Durante el desarrollo de una protesta por escasez de agua en la provincia suroccidental iraní de Juzestán, murió un manifestante tras recibir un disparo.
El gobernador interino de la ciudad de Shadegan, Omid Sabripur informó este 17 de julio -según reseñó EFE- que el hecho ocurrió la noche del día anterior a causa de un grupo de «alborotadores».
«Anoche, algunas personas en Shadegan se habían concentrado para protestar por la falta de agua provocada por la sequía y los oportunistas y alborotadores» que aún no han sido identificados «dispararon y mataron a uno de los manifestantes», indicó, haciendo referencia a que desde el pasado 15 de julio los ciudadanos reclaman por el vital líquido.
Detalló que los «alborotadores» -cuya intención era «provocar a la gente»- dispararon al aire y desafortunadamente una de las balas «alcanzó a una persona presente en el lugar y lo mató».
«La identificación de los autores de este incidente está en la agenda de las fuerzas de la policía y de seguridad», sentenció.
El verano azota con fuerza a Juzestán, donde más de 200 animales de ganadería han muerto de sed, reseñó la agencia local iraní de noticias ISNA, haciendo referencia al testimonio del líder supremo del Gobierno en la localidad, Mohamad Nabi Musavifard.
Aunque Juzestán es la provincia más rica del país por la explotación de los recursos petroleros y gasíferos, la población enfrenta escasez de agua por problemas medioambientales que afectan también la agricultura y ganadería.