Antonio José Amell Cantillo, sustraía del hospital público Enrique Tejera, dosis de Remdesivir para expenderlas en dólares
El médico colombiano, Antonio José Amell Cantillo, residente de Medicina Interna en la Ciudad Hospitalaria Enrique Tejera (CHET) del estado Carabobo, fue arrestado por vender medicamentos que distribuye el gobierno de forma gratuita para tratar el COVID-19, anunció este 9 de septiembre el fiscal general de la República, Tarek William Saab.
Durante una rueda de prensa, manifestó que la detención se logró gracias al «trabajo de inteligencia realizado por el Ministerio Público (MP) con la Policía Nacional contra la Corrupción y el Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional) como órganos auxiliares, con quienes mantenemos contacto desde el primer momento».
Destacó que las denuncias hechas por los familiares de los pacientes, permitieron descubrir esta trama de corrupción.
«Amell captaba a los familiares y les informaba que el hospital centinela no tenía recursos médicos, y que él podía conseguir cada ampolla de Remdesivir por un costo de 800 dólares, cuando el ministerio de la Salud, lo entrega gratuitamente. De igual manera dirigía a las personas a comercios cercanos al hospital a los fines de que imprimieran las plantillas de ingreso a dicho centro hospitalario, para lo cual también debían pagar», contó Saab.
Como si esto fuera poco, el médico colombiano también «mantenía asociación con al menos 5 farmacias privadas para vender los medicamentos que eran sustraídos del hospital», lamentó, haciendo referencia a que el director del nosocomio, Alexis Rivera, está «siendo investigado para determinar si hubo complicidad de su parte».
El pasado 3 de septiembre, la subdirectora de la CHET, ordenó a Amell el ingreso del paciente José Reyes de 74 años a quien le recetaron 4 ampollas de Remdesivir. De inmediato el médico, se puso en «contacto con familiares de un fallecido, quienes habían adquirido previamente el medicamento y acordó la adquisición por un monto de 1.800 dólares y su posterior venta por 3.200 dólares».
Reyes, recibió una sola dosis al día siguiente y murió 45 minutos después.
Allanamiento de la residencia del galeno
Al momento de su detención, el MP halló en su residencia «insumos médicos y medicamentos: 55 recipientes de polvo liofilizado para dilución, 132 viales y 15 envases de solución fisiológica producidos para uso hospitalario exclusivo en Colombia», detalló.
Junto a Amell, detuvieron a Francis Margarita Aguiar Salazar, representante de la Quincalla y Frutería Central, ubicada detrás de la CHET, donde se «incautaron planillas y formularios de documentos».
Colombia condena el arresto
«En Colombia se ha pretendido armar un escándalo por la detención de este médico. Se han pronunciado un grupo de congresistas y la Cancillería de ese país, haciendo ver que se trata de una detención arbitraria y de que su vida corre peligro», expresó al tiempo que calificó a Antonio José Amell Cantillo, como un «delincuente».
Enfatizó que lamentablemente el gobierno de Iván Duque, no deja de pronunciarse en defensa de los facinerosos.
«Me gustaría ver pronunciamientos de congresistas condenando masacres que ocurren día a día también en Colombia. Este 7 de septiembre, hubo 2 más con 5 fallecidos en Bajo Cauca y 3 en el sur de Bolívar, entre ellos 2 venezolanos. Con estas van 53 masacres solo este año».
Amell, fue imputado por concusión, contrabando de extracción y asociación para delinquir, mientras que Aguiar se le impusieron los cargos de forjamiento de documentos públicos, contrabando de extracción y asociación para delinquir.