señalan que van a reducir el personal en otros organismos alemanes establecidos en Ucrania ante cualquier amenaza
Annalena Baerbock, ministra alemana de Exteriores, sostuvo hoy que se va mantener «abierta» la embajada de Alemania en la capital ucraniana, Kiev,. Sin embargo, señalo que van a reducir el personal en la legación diplomática así como en otros organismos alemanes establecidos en Ucrania.
La ministra informó sobre estas medidas en una rueda de prensa en El Cairo, al término de una reunión con su homólogo egipcio, Sameh Shukri, en la que hablaron de la actual situación política en Libia o el conflicto entre Israel y Palestina.
Baerbock, que visitó hace unos días el este de Ucrania, divulgó su preocupación por la amenaza de un ataque ruso inminente contra territorio ucraniano, y recordó que el canciller alemán, Olaf Scholz, viajará a Kiev el próximo lunes.
Además, señalo que su país está «haciendo todos los esfuerzos para encontrar una solución» a la escalada de tensión y recordó que este mismo sábado habrá una ronda de conversaciones entre los presidentes de Francia y Estados Unidos con el ruso, Vladimir Putin.
«Estamos dispuestos a (alcanzar) una solución, pero cualquier otra agresión contra Ucrania va a tener un precio muy alto porque vemos que, a nivel militar, no hay ninguna señal del fin de la escalada, sino lo contrario: (los rusos) aumentan sus fuerzas en Bielorrusia. Desde ayer hay entrenamientos militares de soldados rusos cerca de la frontera», aseveró la ministra.
Por tal motivo, advirtió que es preciso prepararse «para todos los escenarios diferentes» e indicó que «con este propósito hay consultas intensivas» con los «socios y amigos» de Alemania.
Baerbock , afirmó que el Ministerio de Exteriores alemán anunciará próximamente una «advertencia para no viajar a Ucrania y, a los que se encuentren ahí se les pide salir o intentar salir del país».
Estados Unidos, Gran Bretaña, Noruega, Holanda, Bélgica, Australia, Nueva Zelanda y España, entre otros, también han pedido a sus ciudadanos en Ucrania que abandonen el país.
Rusia sigue negando su intención de invadir Ucrania, pese a que sigue aumentando su presencia militar en la frontera ucraniana.